¿Qué es la representación en auditoría fiscal?

La representación en una auditoría fiscal, también conocida como defensa en una auditoría, implica que un profesional fiscal o legal actúe en nombre de un contribuyente (ya sea un individuo o una empresa) durante una auditoría fiscal del IRS o estatal. Los contribuyentes pueden tener un representante durante las auditorías, siempre que la persona esté autorizada a ejercer ante el IRS o la autoridad fiscal estatal pertinente. Los representantes aceptables incluyen a los profesionales del Tribunal Fiscal de los Estados Unidos (USTCP), los agentes registrados (EA) y los abogados.

Un representante de auditoría elabora una estrategia para defender el caso del contribuyente, ayuda a reunir la documentación necesaria solicitada por la autoridad fiscal y, por lo general, maneja toda la comunicación y las reuniones con el IRS o los funcionarios fiscales estatales en nombre del contribuyente.

¿Qué pasa si te auditan?

Ser objeto de una auditoría puede ser estresante, pero la mayoría de las auditorías (alrededor del 70 %) son simplemente solicitudes de documentación adicional por correo. Por lo general, se resuelven enviando los formularios necesarios, como un 1099 o recibos de deducciones. Sin embargo, algunas auditorías implican reuniones en persona con un agente, lo que puede resultar más intimidante.

Pasos clave a seguir durante una auditoría fiscal:

1. No ignore la correspondencia del IRS: responda al IRS con prontitud. Ignorar el problema no hará que desaparezca. Si es necesario, usted o su representante pueden solicitar una breve prórroga para reunir la documentación necesaria.

2. Determine si necesita representación:

• Para solicitudes de documentos simples, es posible que no necesite un profesional.

• Si no puede encontrar la información requerida o le citan para una auditoría en persona, es recomendable contratar a un profesional en materia fiscal, como un EA o un USTCP. Deberá otorgarle un poder notarial para que actúe en su nombre.

3. Cíñete a la información solicitada: el IRS suele auditar teniendo en cuenta preguntas específicas. Proporciona únicamente los documentos o las respuestas que te piden, sin dar detalles innecesarios. Compartir demasiado puede complicar el proceso, así que deja que tu representante te guíe.

Después de la auditoría fiscal

Una vez que concluya la auditoría, el IRS determinará si se deben impuestos o multas adicionales. Si no está de acuerdo con los resultados, puede apelar. A menudo, el IRS está dispuesto a negociar un acuerdo para evitar batallas legales prolongadas. Contar con un asesor con experiencia puede ser invaluable en esta etapa para escalar y resolver el caso a su favor.

¿Por qué elegir una representación de auditoría profesional?

Si ha recibido una notificación de auditoría, es mejor no ocuparse de ello solo. Incluso si cree que no ha hecho nada malo, una representación profesional garantiza la protección de sus derechos y que el proceso transcurra sin problemas. Un representante con conocimientos actúa como un amortiguador entre usted y la autoridad fiscal, protegiéndolo de complicaciones y estrés innecesarios. También puede preparar y presentar su caso de manera eficaz, ya sea que la auditoría sea personal o relacionada con su negocio.

La mayoría de las auditorías se pueden resolver por correspondencia sin necesidad de comparecencias en persona, lo que permite a los profesionales ayudar a los clientes de todo el país. Desde la recopilación de documentación hasta la negociación de acuerdos, la representación profesional en auditorías garantiza que usted esté bien preparado y posicionado para obtener el mejor resultado.